Encuentre su límite

Muchas personas con intolerancia a la lactosa piensan que no pueden consumir ningún producto lácteo. Esto generalmente no es verdad. Muchas personas intolerantes a la lactosa pueden comer o beber pequeñas cantidades de productos lácteos sin tener síntomas. Para encontrar su propio límite, tome nota de lo que come y bebe. Anote cuando tiene síntomas. De esta forma podrá descubrir cuáles son los productos lácteos que tolera y en qué cantidades.

Consejos para evitar los síntomas

• Elija productos lácteos con bajo contenido de lactosa o sin lactosa. Estos están ampliamente disponibles. Incluyen productos como la leche, el yogur, el queso y el helado, entre otros.

• Consuma alimentos con cultivos activos, tales como yogur. Los cultivos activos facilitan la digestión de la lactosa.

• Cuando consuma productos lácteos, combínelos con otros alimentos para reducir los síntomas.

• Consuma jugo de fruta o leche sin lactosa (como la leche de soya o de almendras) para reemplazar parte o toda la leche en las recetas.

• Tome comprimidos de enzima lactasa cuando ingiera productos lácteos para ayudar a prevenir los síntomas.

• No consuma muchos alimentos con alto contenido de lactosa a la vez, como leche, manteca y helado.

Ingiera otros alimentos ricos en calcio

Si consume menos productos lácteos, es posible que consuma menos calcio y vitamina D. Consulte al proveedor de atención médica sobre suplementos de estos nutrientes. Además, trate de consumir más alimentos no lácteos, ricos en calcio, tales como:

• Brócoli, col, lechuga verde, col china, hojas de nabo

• Pescados con huesos comestibles (salmón o sardinas enlatadas)

• Brotes de alfalfa y de soya

• Tofu, soya, frijoles pintos y frijoles blancos

• Almendras, semillas de sésamo

• Jugo de naranja fortificado con calcio, bebida de soya, bebida de arroz

• Naranja

Tenga en cuenta que el calcio en estos alimentos varía. Puede no ser tan bien absorbido por el cuerpo como el calcio de los productos lácteos. 

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